Irte de vacaciones y que justo caiga un "nuevo" en el laburo al que le dan "provisoriamente" tu silla, escritorio y PC.

No poder distinguir cuál es Melchor y cuál Gaspar.

Meterte en la ducha y ya mojado/a te das cuenta que no tenés toalla o casi no hay jabón y salís a buscar puteando y mojando el piso.

Tener uno o unos pocos alimentos con los cuales podrías vivir comiendo únicamente eso el resto de tu vida.

Sacar decenas de fotos con la cámara digital y no volver a verlas en la puta vida porque ya no es necesario revelarlas.

Compartir el ascensor con gente que habla gansadas o banalidades porque no soporta estar en silencio.

Romper un espiral (generalmente la base) durante el proceso de separación.

Pagás con débito porque sabés que te quedó justo para la compra y te la rebotan porque ese día te cobraron algo en la cuenta.

Te guardás un vino, champú, licor, etc... para una ocasión especial y cuando ésta llega te olvidás de abrirlo.

Cada vez que salís del lavadero, el auto -misteriosamente- funciona mejor por un tiempo.

Por más detergente que le pongas nunca vas a poder sacar la grasa de la asadera.

Volver a reunirte el 25-12 y/o el 1-1 con la misma gente que viste hace unas horas, para comer los "requechos" de la noche anterior.

Acomodar, en casas ajenas, ciertos objetos según nuestro gusto o criterio (x ej. yo cambio el papel higiénico para que salga x abajo)

Dejar la ropa más nueva y linda para salir, cuando en realidad se pasan 48 horas semanales en la oficina y 3 o 4 en una salida.

"Cuchichear" en el laburo, facu, reunión familiar, etc... y que justo aparezca la persona involucrada.